Cuento fantastico
TIEMPO CONTADO -Nombre del paciente: Edgar Sinón. Causa: tiro de bala a sangre fría. Estado: grave, con probabilidad de muerte de una hora-le decía la enfermera al doctor tras hacer una revisión exhaustiva del cuerpo. Unas luces, un testigo, adrenalina y las doce. Edgar intentaba recordar, mientras estaba viviendo una realidad muy fatal, en la que no podía saber si estaba vivo o muerto. Tras haberse despertado de sus sueños instantáneos, pudo sentir una abrumadora brisa que recorría toda la sala. Lo único que podía ser el aire de una puerta en constante movimiento, y así era, solo que esta vez no podía enfocar a una enfermera que entraba por esa puerta, sino alguien más, alguien que hasta ahora él no había visto, y esa duda lo hacía vacilar: ¿qué demonios estaba viendo? La persona se había ido. Ya no le llegaba la brisa, ahora sentía que se estaba ahogando, y